Suicidio Juvenil

Compartir con amigos
  • Descripción
  • Programa
  • Actividad

El suicidio ha de considerarse como un grave problema de salud pública a nivel mundial y un problema sociosanitario de primera instancia que afecta, sobremodo, a jóvenes y a adolescentes, siendo este la primera causa externa de muerte y duplicando las defunciones por accidentes de tráfico en esta edad. También conlleva un gran impacto personal y familiar en las personas más cercanas de quien lo comete o tiene intenciones de hacerlo, además de tener un fuerte impacto socioeconómico en las comunidades, países y sociedades. En cuanto a concienciar y prevenir las conductas suicidas, ha de ser una cuestión prevenible en su totalidad, tal y como expone la OMS. A pesar de que la incidencia de las muertes por suicidios no sea tan recurrente como lo son las enfermedades cardiovasculares, respiratorias o infecciosas, estas son más altas de lo que se piensa. Según la OMS, el suicido es una de las causas iniciales no accidentales a nivel mundial y se estipula que cada 20 segundos hay una muerte por suicidio en el mundo. A nivel mundial y en los últimos 45 años, las muertes por suicidio han aumentado en un 60% y la franja de edad en la que más se ha incrementado la incidencia es en los/as adolescentes, llegando a ser la segunda causa principal de muertes en la franja de 15 a 29 años. En numerosos países de la UE, el suicidio es la causa inicial de mortalidad en la adolescencia, mientras que, en España, según el INE “es la primera causa de muerte externa presentando una tasa de 7,7/100.000 habitantes de muertes por suicidio en el 2016, el doble de muertes que por accidentes de tráfico. En los/as adolescentes, el suicidio ha aumentado casi un 50% desde el año 2004, siendo también la primera causa de mortalidad externa en estas edades”. A la problemática del suicidio hay que añadirle las autolesiones no suicidas, un fenómeno emergente entre los/as jóvenes, según resultados de estudios recientes. Además, incluyendo la transversalidad y el diagnóstico, se puede considerar que el suicidio está muy relacionado con problemas psicológicos diversos, causando un gran estigma y sufrimiento. A pesar de que las causas de presentar una conducta suicida sean multifactoriales y existan distintas interacciones entre los factores de riesgo, en adolescentes y en otros rangos de edad, existen algunos factores genéticos, biológicos y familiares predisponentes a sufrir dicha conducta en algún momento de la vida. Dentro de los factores que podrían presentar un mayor riesgo estarían: tener un trastorno afectivo previo, haber tenido un intento de suicidio anteriormente, abandono de la escuela, la ideación de la conducta suicida, el absentismo escolar, tener antecedentes familiares de tentativa de suicidio o ser víctima de malos tratos, entre otros. Siguiendo esta línea y centrándonos en los problemas de salud mental en los/as adolescentes, como factor de riesgo a desarrollar una posible conducta suicida, el 20,8% de los y las adolescentes de 10 a 19 años (el 21,4% de las niñas y el 20,4% de los niños) presenta algún tipo de problema de salud mental diagnosticado, situando esto a España como líder europeo con mayor prevalencia de problemas de salud mental en niñas, niños y adolescentes. Si además nos situamos en la pandemia por COVID-19, podemos observar que los niños, niñas y adolescentes adquieren una posición aún mayor de vulnerabilidad, ya que, el constante desarrollo de sus estructuras y su personalidad agravan esta condición, sobre todo en el sistema nervioso, que aún no está completamente desarrollado. Además, en diversas investigaciones sobre las consecuencias psicológicas de la COVID-19 y el confinamiento, se ha observado un mayor porcentaje en los/as más jóvenes que presentaban malestar psicológico, aumento de la ansiedad, depresión, estrés, problemas de concentración e irritabilidad. Toda esta situación de vulnerabilidad pone a los niños, niñas y jóvenes en un contexto de propensión a desarrollar una conducta suicida.

Motivados por tal realidad, desde el Equipo Sanitario y de Bienestar Social de AMEPRE, consideramos esencial atender las características personales, familiares y de salud de los/as adolescentes para conseguir abordar la prevención de estas conductas suicidas, que están cobrando especial relevancia en los últimos años. Por ello, nuestro objetivo principal es prevenir, concientizar y sensibilizar en la temática del suicidio a familiares de adolescentes que tengan problemas de salud mental, como ansiedad y/o depresión, ya que, consideramos que la familia es una unidad básica en la sociedad, por lo que una manera correcta de cambiar aquellos aspectos negativos o problemáticos sociales es trabajar desde el ámbito familiar, donde se comienza a convivir, se dan los primeros aprendizajes, se establecen las primera relaciones sociales, se aprende a comunicarse, a tener respeto hacia los y las demás, se consigue afecto y apoyo necesario para resolver conflictos y ganar autonomía. Es decir, es donde se conforman las condiciones necesarias para un desarrollo personal y social adecuado.

Programa de formación familiar para la sensibilización y concienciación sobre el suicidio en jóvenes con problemas de salud mental. El programa se desarrollará siguiendo una metodología participativa. Se llevará a cabo con la participación voluntaria de familiares con hijos e hijas con problemas de salud mental y con riesgo de desarrollar una conducta suicida; y con la coordinación de profesionales expertos/as en materia de suicidio, trastornos mentales y salud mental en la infancia y adolescencia.

Se desarrolla en 13 sesiones de 2 horas de duración, en el que se trabajarán los siguientes contenidos:

Sesión 1: Presentación de los y las profesionales y primer acercamiento a las familias, así como a sus antecedentes psicológicos y sociales en la salud mental de los y las adolescentes a los/as que acompañan.

Sesión 2: Rasgos característicos de la preadolescencia y adolescencia. Gestión de las emociones. Salud mental y trastorno mental.

Sesión 3: Habilidades sociales, afecto y comunicación asertiva en el ámbito familiar.

Sesión 4: Fomento de la adquisición de hábitos de vida saludable y la importancia del autocuidado y el cuidado de los hijos e hijas.

Sesión 5: Aprendizaje de técnicas de resolución de conflictos en el ámbito familiar y estilos de crianza.

Sesión 6: Atención y apoyo a la salud mental en la adolescencia.

Sesión 7: Situación de vulnerabilidad en los/as adolescentes con problemas y enfermedades de salud mental.

Sesión 8: Factores de riesgo, mantenedores y protectores en la prevención de las conductas suicidas.

Sesión 9: Favorecer la estimulación del desarrollo integral de los y las adolescentes con problemas de salud mental y prevenir las dificultades en el desarrollo.

Sesión 10: Estereotipos de género y socialización diferenciada en cuanto al desarrollo de la conducta suicida y perspectiva de género en los problemas de salud mental.

Sesión 11: Información y asesoramiento a las familias sobre los diferentes recursos, organismos e instituciones existentes en materia de salud y bienestar social.

Sesión 12: Falsos mitos y creencias sobre el suicidio. Motivación y autoestima.

Sesión 13: Aprendizaje de técnicas para manejar la ansiedad y estrés. Ejercicios de relajación y mindfulness.