Los pilares de una alimentación saludable

La alimentación saludable el aspecto principal de todos nosotros que nos afecta no solo a la salud física sino también a la salud mental.

Muchos afirman que ‘somos lo que comemos’, con lo cual, no cabe duda que mientras más sanos comamos gozaremos de mejor salud.

La vida sana repercute en nuestro día a día, en nuestro trabajo, en nuestras relaciones, con lo cual es, con toda probabilidad el motor de nuestra vida. Por ese motivo es fundamental como debe ser una alimentación saludable.

Hoy os queremos mostrar cuales son los pilares para que adquiráis los hábitos de cuidaros, tanto por dentro como por fuera, en el aspecto alimentario.

Puede que hayáis llegado aquí tras ‘navegar’ por la red y tengáis ya mucha información recopilada o incluso alguna confusión. Por ese motivo os queremos mostrar en este artículo, de forma breve y sencilla, cuáles son los pilares de una alimentación saludable para nosotros:

  • Proporcionarle al cuerpo todos los nutrientes que necesita. No hay un único alimento que cubra todas nuestras necesidades nutritivas. Por eso tenemos que tener una dieta variada en alimentos que nos den vitaminas, proteínas, hidratos de carbono, grasas, hierro, magnesio y más.
  • Aprovecharnos de los alimentos de temporada. Son aquellos que mejor están en cada momento, con lo cual será el mejor momento para su consumo y extraer el máximo beneficio para nuestro cuerpo en materia de nutrientes.
  • Aprovecharnos de productos de cercanía. La experiencia hace que se cultiven alimentos, en el caso por ejemplo de las verduras, en las zonas más propicias para estos. Eso hace que sean cultivos con éxito demostrable y que, si se siguen cultivando, es porque son beneficiosos. Mejor consumir productos de proximidad de los que se puede conocer su trazabilidad desde el campo hasta nuestro plato.
  • Romper con el tópico de que el alimento sano no es sabroso y no está rico. Siempre hay alguna forma de comer algún producto que le de un enorme sabor y nos guste. Cada uno debe buscar la forma que prefiere. No debemos ingerir un alimento ‘a la fuerza’ porque sea sano, ya que al final acabaremos aborreciéndolo. Investiga y prueba, seguro que encuentras formas de que te resulte sabroso.
  • Evitar los productos procesados. Para llegar a nuestras mesas han sufrido procesos y cambios, conservantes añadidos, edulcorantes, … Esto puede hacer que hay perdido los nutrientes que tenían originalmente y, lo que creíamos que era sano, ya no lo es. Estos procesos hacen que se reduzcan las cantidades de vitaminas, proteínas y otros nutrientes que, de consumirlos de forma original y natural, nos serían muy saludables.

Desde AMEPRE buscamos siempre que los hábitos de una alimentación saludable sean además sabrosos, que al comer disfrutéis de los platos y, además, os llenéis de salud.

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