Todo el mundo necesita tener un cerebro saludable con el fin de alcanzar una vida plena. En este tiempo en el que vivimos nos hallamos especialmente necesitados de un cerebro fuerte y de una mente aguda. La inteligencia, la perspicacia, el discernimiento, la memoria y el autocontrol no se desarrollan espontáneamente. Entre otras cosas, requieren de un cerebro bien nutrido.
Los alimentos que ingerimos pasan a la corriente sanguínea en el intestino, llegando después al cerebro. Si el dicho “somos lo que comemos” es literalmente cierto, también lo es el de “pensamos y nos comportamos tal como comemos”.
Los alimentos deben proporcionar diariamente los nutrientes que necesita el cerebro con el fin de funcionar adecuadamente. La glucosa, las vitaminas, los ácidos grasos y los fitoquímicos de las verduras se hallan entre los más importantes.
Glucosa para las neuronas
La glucosa es el nutriente más importante para las neuronas. Estas células altamente especializadas tienen la capacidad de convertir la energía química de la glucosa en la energía eléctrica necesaria para la transmisión de los impulsos nerviosos. La glucosa es el azúcar mas abundante en la naturaleza vegetal. En realidad la glucosa es la primera sustancia química producida por las plantas a partir del dióxido de carbono atmosférico y del agua. Esta reacción química, llamada fotosíntesis, constituye la base de la vida en el planeta Tierra.
Todos los frutos y muchos de los alimentos vegetales contienen azúcar de origen natural. El azúcar no es un veneno sino un ingrediente natural necesario para nuestro cerebro. Es tan abundante en las plantas, entre otras razones, por el hecho de que lo necesitamos.
Comer frutas y cereales garantiza una adecuada provisión de glucosa a las neuronas. Pero atención: no necesitamos azúcar puro; en realidad este no es saludable. Lo que nuestras neuronas necesitan es azúcar, si; pero acompañada de fibra, vitaminas, minerales, fitoquímicos y todos los otros componentes de las frutas. De esta forma cuando ingerimos una fruta estamos obteniendo un paquete completo de nutrientes, no diseñado por ningún laboratorio humano, que incluye el azúcar.
El todo es más que la suma de sus partes
Todos esos ingredientes naturales de la fruta, incluido el azúcar, contribuyen a que el todo sea mucho más que la suma de sus partes. Podemos decir que a las neuronas les encanta recibir ese paquete completo de nutrientes, que incluye el azúcar, de las frutas.
Por el contrario cuando tomamos azúcar pura refinada y blanca producida en una factoría humana, tal como se encuentra en los refrescos, en las golosinas, o en la bollería industrial, se produce un desequilibrio y un estado de irritación en las neuronas. Primeramente son estimuladas pero después viene la depresión y los cambios bruscos de humor. Y el páncreas, donde se produce la insulina, resulta sobrecargado después de consumir azúcar desprovista de sus sustancias naturales de acompañamiento.
Estimado lector, no salgas de casa por la mañana sin haber tomado tus piezas de fruta, tus cereales integrales, y un puñado de semillas o de frutos secos. Y al mediodía no te olvides de comer una buena ración de ensalada de hortalizas crudas. Tu cerebro estará feliz y bien dispuesto para hacer frente a los desafíos del día.
Dr Jorge D. Pamplona Roger.
Doctor en Medicina y Cirugía y Máster en Salud Pública.Autor de El poder medicinal de los alimentos y de otras obras publicadas por Editorial Safeliz.